Nuestros equipos, además de funcionar de forma totalmente independiente, se integran fácilmente en cualquier ciclo industrial preexistente: no sustituyen el proceso químico preexistente, sino que lo multiplican, acelerándolo y potenciándolo hasta más de diez veces.
En resumen, nuestros equipos se pueden aplicar en todos aquellos procesos químicos de cualquier naturaleza.
Las ventajas para los usuarios de nuestra maquinaria se resumen en:
- Reducción de los costes de producción;
- Reducción de los costes relacionados con la expansión de la producción;
- Reducción de los tiempos de proceso;
- Aumento de la cantidad de matriz procesable;
- Reducción de los costes de eliminación.
En cuanto a la hidratación, gracias a la cavitación, esta puede ser continua, consistente y competitiva, reduciendo al mismo tiempo la cantidad de matriz necesaria para obtener el nivel de viscosidad deseado.
En cuanto a la aireación, esta es siempre uniforme con volúmenes de gas pequeños y grandes, por lo que es óptima tanto para líquidos viscosos como para caucho.
En cuanto a la pasteurización y homogeneización, la cavitación previene la formación de incrustaciones en las paredes del aparato, reduciendo el tiempo de inactividad necesario para la limpieza. Además, la menor degradación de las proteínas presentes permite prolongar los periodos de almacenamiento e incluso la creación de productos completamente nuevos.
En cuanto a la emulsificación, la cavitación previene la formación de bolsas de aire atrapadas en el fluido, manteniendo así constante la calidad de los productos. Además, la posibilidad de procesamiento continuo facilita el control del grado de emulsificación.
